EL NARCÓTICO SABOR DEL SUEÑO
Me convertí
en un adicto al narcótico sabor del sueño,
mientras iba
degustando horas de mi inconsciente
entre
imágenes irreales de ideales añorados,
anhelados
por la voluntad secreta de mi deseo,
me sumía en
la entrega voluntaria de mi cuerpo a Morfeo,
dejando éste
anclado al lecho al que arrojé
mi última
dosis de realidad consciente.
Sólo, así,
conseguía ser libre volando entre la fantasía
de ansiadas
quimeras, abrazando ensoñaciones,
habitando en
letargos que al despertar olvidaría.
Autor: José Sánchez Llamas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario