EL DESCANSO DE UN ÁNGEL
Ella dormía serena, y
en la inmensidad de su noche
quise apartar el velo
de estrellas que velaban su lecho,
como una ilusión
mágica de luz que protege el descanso
de un ángel.
Hipnotizado por la
magnitud de su belleza, solo pude
sentarme a su lado y
admirar el coraje de una vida
con cicatrices que tatúan
su alma desde el silencio
de su valor y la
guerra de sus días.
Como un fantasma
enamorado vuelvo aquí
cada vez que la
realidad nos separa
para unir nuestros
sueños.
Autor: José Sánchez Llamas
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