LA VERDAD DE MI RELATO
Como una peligrosa fe
del creyente más devoto
y tras todo el
malditismo de esa literatura oscura
que emponzoña la
tinta de este relato
admito que, ya no
escribo renglones que mantengan
en equilibrio esta
locura de amarte entre jirones
desgarrados de un
sueño, y en esa herida de todas
mis noches, sigues
siendo, tú, la única realidad tangible
que serena las voces
de una conciencia culpable
de volver a extrañar
esos viajes de mis manos por tu piel,
como un lienzo sobre
el que alojar los trazos de un pincel,
porque desnudarte no
consiste en desvestirte y sí
en el arte de
acariciar tu alma como una suave melodía
del mar rompiendo
contra las rocas.
Por todo ello reconozco
que, he sido creador de fantasías
que se rompieron en
una madrugada y autor de desvelos
que juraron ante tus
ojos la promesa de amarte,
con tu mirada de
testigo, tu piel como frontera
y mis huesos como
cárcel de este reo
sentenciado a ti.
Autor: José sánchez Llamas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario