UN CADÁVER DESOLADO
Envenenado
por ti, me derrumbo y muero porque te quiero
mientras tu amor
nocivo corrompe mis venas,
más si he de
morir espero que la vida que te llevas contigo
no se
convierta en otro viaje más hacia el olvido
de los
amores descuidados.
Ten en
cuenta que, hoy, muero por ti
como jamás
antes pude morir por nadie,
y alejándote
de mí sólo renuncias a las cenizas
del fuego
que arrasó conmigo dejando un cadáver desolado.
Autor: José Sánchez Llamas.
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