EL RASTRO QUE DEJASTE
Éste huérfano quejido
se niega a entregar
mis besos a otra boca
que no sea la tuya,
a sentir la palpitante
espera de otros pasos
atravesando la calle
hasta encontrarme.
¡Me niego a amar a
otra!
A sentir las huellas
de otro tacto marcando mi piel,
borrando el rastro
que dejaste…
No dejaré que este sentimiento apasionadamente
romántico
se suicide en otros
brazos, porque no quiero
entregarme a nadie, como
me entregué a ti.
Autor: José Sánchez Llamas.
Éste huérfano quejido se niega a entregar
ResponderEliminarmis besos a otra boca que no sea la tuya,
a sentir la palpitante espera de otros pasos
atravesando la calle hasta encontrarme.