MI RECUERDO MÁS ERÓGENO
Acaricia tu cuerpo
con el alba esa trémula gota de rocío
que va vistiendo tu
piel de caricias mientras desciende zigzagueando
temerosa de caer al
suelo y derramarse.
Y es que, no hay
mejor copa para beber
que tu propio cuerpo.
Siento celos de esa
gota, de esa caricia palpitante,
de no sentir como se
estremece tu piel al sentirla.
Siento sana envidia
de la caricia de tu ropa
cuando llega la noche
y te desnudas,
sin apreciar cómo te
acaricia de arriba abajo
con el más sutil de
los tactos.
Quisiera tanto ser
tus sábanas una noche...
dormir arropando tu
cuerpo desnudo con mis brazos,
estar sobre ti o
debajo...
Sentir la sensual
caricia involuntaria de tu pecho al respirar,
sentir el brusco
movimiento de tu cuerpo
al cambiar de postura...
Sí, confieso estar
enfermo de ti,
confieso estar loco
de pasión
y ebrio de deseo por
tu cuerpo,
sediento de caricias y
ansioso por sentirte.
No es que sea un
demente más,
simplemente, amo la
idea de amarte,
de sentirte con mi
cuerpo a cada instante,
mientras te beso,
mientras te toco, mientras pienso...
en el febril tacto de
tu piel agitada por la sorpresa de mis caricias,
en el caliente aliento
de tus labios recorriendo mi cuerpo,
en el alocado e
irregular ritmo de cada uno de tus suspiros,
en la desgarradora caricia
de tus uñas arañando mi espalda.
No aguanto un sólo
instante más sin ti...
no soporto tener que pensarte
en lugar de verte.
Tú, eres recuerdo más
erógeno de mi mente,
y sin ti, mueren de
castidad mis ganas de amarte.
Tú, eres recuerdo más erógeno de mi mente,
ResponderEliminary sin ti, mueren de castidad mis ganas de amarte.