FORJANDO UNA ESPADA
Una vez escuché que: “Para
forjar una espada
hay que golpearla
muchas veces para eliminar
sus impurezas y
fortalecer el acero”.
Creo que, en el
fondo, cada uno de nosotros
somos esa espada que
se va forjando a base de vida…
Recibiendo un golpe
tras otro del destino
para fortalecer el
carácter que nos da la fuerza
para seguir
combatiendo en cada batalla
y cada guerra a la
que esta existencia
nos enfrenta, bien
sea contra cualquier problema
o contra nosotros
mismos.
Autor: José Sánchez Llamas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario