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domingo, 1 de marzo de 2015

MAÑANA PUEDE SER ESE DÍA

MAÑANA PUEDE SER ESE DÍA

Llegará el día en que se liberen mis brazos
del peso de tanta soledad,
en que la luna no sea tan gris,
ni el sabor de las lágrimas tan salado.
Llegará el día en que deje de escribir
cartas a nadie, sin remitente ni destino,
con la esperanza de obtener una respuesta
que nunca llega.
Llegará el día en que deje de soñar
con una vida distinta, con distintos objetivos,
con palabras de aliento que llenen mis fuerzas
del valor que no tengo,
y como cobarde moriré, sin legado ni huella
sin ilusión ni alegría,
sin más presente que mi pasado,
sin más pasado que mi presente ausente.
Llegará el día en que ya no escriba versos tristes
con espinas sobre los escombros y ruinas
de un corazón demolido que tras un traspiés...
Llegará el día en que te conozca,
o descubras que me conoces,
aunque en realidad no me conozcas,
pero lo sentirás así y pensaras
que soy algo más que un tétrico
pesimista de relatos sin estilo definido,
pensarás que compartimos cosas
aunque jamás nos hayamos visto,
pero mis vivencias son ficticias
y eso nunca lo creerás...
Llegará el día en que despertemos de la pesadilla
y sigamos durmiendo creando nuevos sueños
de infinita esencia y en su substancia
sólo seremos etéreos y tan volátiles
como la fragilidad de nuestro pensamiento.
Sé que pronto todo llegará,
porque mañana, puede ser ese día. 


Autor: José Sánchez Llamas.

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