SENTADO FRENTE A LA PARED
Sentado frente a la
pared reflexiono
ante el frío tono blanco de este purgatorio de
dudas,
de este no saber lo
que quiero, pero sí saber lo que no quiero.
Me cansé de llorar y
lamentarme por algo que nunca tendré,
me harté de
balancearme cada día haciendo equilibrios
en la delgada y
frágil línea que separa mi amor
de tu amistad...
Pero cuesta tanto
arrancarte de mí...
sacar de mis entrañas
esta sensación tan sensible ante tu imagen...
Cuando acariciaba tu
pelo podía sentir como se esfumaba
tu juventud entre mis
dedos...
como se iban
esfumando tus ganas de verme.
Sentado frente a la
pared me escucho a mí mismo,
y en mi castigo
voluntario de no querer ver ninguna otra imagen
omito de mi vista los
colores para no tener ningún otro color que maldecir más que el blanco...
mientras intento
convencerme de que ya no debo verte más.
Sentado frente a la
pared escucho silencios
que no puedo defender
con palabras,
y termino
pronunciando tu nombre
con tu melancólico
sabor en mis labios.
Autor: José Sánchez Llamas.
Sentado frente a la pared reflexiono ante el frío tono blanco de este purgatorio de dudas
ResponderEliminar