MARIONETA ATADA
No sé cómo saborear
el momento,
no sé cómo condensar
el silencio,
ni sé cuánta dosis de
dolor hay en cada lágrima derramada,
ni qué porción de
alegría se alberga tras cada sonrisa.
No sé quererte cómo
quieres que te quiera
porque amo amarte con
esta locura loca de sentimientos.
Quiero aprender a
quedar preso de sonrisas ajenas,
a que cada segundo de
vida sea un segundo más de ilusión.
Quiero esconderme de
mis miedos y tormentos
para anidar con estas
alas rotas en tu dulce e inocente mirada,
y así, coser con el
hilo de tus pestañas de nuevo mis alas,
pero no para alejarme
de ti, sino para poder llevarte volando junto a mí
al mundo dónde se
cumplen tus sueños, donde la fantasía es realidad.
Quiero olvidar este
lamento de palabras y silencios,
de vacíos y ausencia,
de vacíos y ausencia,
quiero que tu boca
sea el altavoz de tus deseos y que mi carne
sea esclava de tus
caprichos...
porque hoy no quieres
quererme cómo quiero que me quieras.
Hoy tu sed de locura
ataca mis murallas
y soy débil ante tu
imagen.
Quiero aprender a ser
fuerte frente a tus besos de carne y fuego,
a no ser una
marioneta más atada a ti.
Mañana cortaré los
hilos que me unen a tus manos,
quedaré inmóvil y
aprenderé a sentir desde mi quietud,
aprenderé a saborear
el momento,
a condensar mi
silencio,
a quedar preso de
sonrisas ajenas y pasajeras,
aprenderé a ser yo, y
no lo que tú quieres que sea,
porque dejaré de ser
marioneta para ser estatua viviente,
con un renovado
corazón latente que se olvidará de tus besos calientes.
Autor: José Sánchez Llamas.
No sé cómo saborear el momento,
ResponderEliminarno sé cómo condensar el silencio,
ni sé cuánta dosis de dolor hay en cada lágrima derramada,
ni qué porción de alegría se alberga tras cada sonrisa.