EL LEÓN EN LA TORMENTA
Amiga, quiero decirte
tanto...
pero, tengo tan pocas
palabras...
que ni el cielo es
capaz de callar el estruendoso
bramido del trueno en
mitad de una tormenta
que se torna
tempestad bajo mi pecho,
y en medio de tantas
emociones
siempre te
encuentro...
y se embravece el
pecho del león
al rugir por un
anhelo mientras su aliento
suspira por
satisfacer el mayor de los instintos.
Amiga, quiero decirte
tanto...
aunque lo único que
me ha sobrado
han sido palabras.
Autor: José Sánchez Llamas.
Amiga, quiero decirte tanto...
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