EL ÚLTIMO ESPARTANO
Mi corazón está en
pié de guerra,
y sin más balas que
palabras
aúlla al mundo su furia
desatada
en forma de este
quejido valiente y cargado de arrojo
que patrulla el
viento mientras busca ser escuchado
por aquellos que
compartan este sentimiento.
Hoy, teñiré mi cara
con pinturas hostiles
para resistir a la
vida y al mundo,
para entregarme a
cada día y darle su batalla,
para no perder esta
guerra de guerrillas
en la que soy el
único soldado de un frente
en el que combato con
entrega al son de mi clamor.
Allí, soy un estoico
más, el último espartano,
aquel que sonríe a
sus pesadillas
y las aguarda
desafiante.
Mi alma vomitó todo
su odio en un grito de fuerza
que alentó a mis
ganas de continuar,
de seguir
combatiendo, de seguir sufriendo
y muriendo por un
ideal al que poder aferrarme
cuando ya no quede
nada,
cuando la muerte siga
el rastro de mis pasos,
y caiga mi última
trinchera.
Autor: José Sánchez Llamas.
Mi alma vomitó todo su odio en un grito de fuerza
ResponderEliminarque alentó a mis ganas de continuar,
de seguir combatiendo, de seguir sufriendo
y muriendo por un ideal al que poder aferrarme
cuando ya no quede nada,
cuando la muerte siga el rastro de mis pasos,
y caiga mi última trinchera.