UNA MIRADA QUE ENCIERRA INFINITOS
Cada impulso de besarte
es un salto ciego
al vacío de nuestras
bocas,
donde la pasión mece
el columpio
de nuestros besos en
cada gesto
en los que creo poder
tocar el cielo
con las yemas de mis
dedos
cada vez que te
acaricio,
y soy capaz de soñar
despierto
para darme cuenta de
que eres real,
y sonrío feliz porque
me haces sentir dichoso
cada vez que
contemplo
que un infinito es
capaz de caber en una simple mirada.
Cada impulso de besarte es un salto ciego
ResponderEliminaral vacío de nuestras bocas