EN MANOS DE MI NIÑA NAZARENA
Aviva la sangre el
clamor del tambor
y su redoble de hace
paso abriendo el camino
de la pasión por mis
venas,
dejando espacio para
la voz del verso
que se hace carne en
manos de mi niña nazarena.
Autor: José Sánchez Llamas.
dejando espacio para la voz del verso
ResponderEliminarque se hace carne en manos de mi niña nazarena.