EL VESTIDO PARA TUS OJOS
Te entrego algo más
que una carta en blanco
con el dibujo de mis
letras simulando
la preciosa silueta
de tu cuerpo,
y mi voz se hace
verbo
mientras escribo y te
observo
recordando cada
detalle de tu piel
que memorizaron mis
ojos para
tener el bello
recuerdo que acompaña
tu voz con el eco del
tiempo acariciando
la memoria de un
pasado feliz contigo.
Y por fin, terminé el
vestido para tus ojos
que los míos
comenzaron a desnudar...
Autor: José Sánchez Llamas.