NACÍ PARA AMARTE
Hoy te saludan mis
manos dibujando en tu piel
tu nombre en forma de
suave caricia,
se estremecen mis besos
con el calor de tu suspiro,
y mi piel despierta
de su letargo para sentirte.
Ahora contigo, el
viento siente sus propio escalofrío,
la noche se viste de
estrellas y se pone su broche de luna,
para que nos amemos
como tantas noches,
en tantos momentos de
palpitante oscuridad.
Ahora que has vuelto,
vuelves a ser la sangre
que viste mis venas,
el tuétano que nutre mis huesos,
la musculatura de mi
cuerpo que me ayuda
a sostenerme en pié
para sentirte y hacerme sentir
aún más vivo...
Ahora, valoro más el
silencio porque aprendí lo valioso
que puede ser uno de
tus suspiros.
Tu voz ha dejado de
ser ese fantasma cuyo
eco galopaba por mi
mente atormentando tu ausencia.
Tú eres la única
capaz de llenar este vacío que dejaste,
porque sólo tú, eres
la única razón de mi existencia
porque al conocerte
comprendí,
que yo, nací para
amarte.
Autor: José Sánchez Llamas.
Tú eres la única capaz de llenar este vacío que dejaste,
ResponderEliminarporque sólo tú, eres la única razón de mi existencia
porque al conocerte comprendí,
que yo, nací para amarte.