ANTES DE DEJAR LA NADA
Antes de dejar la
nada, yo, era un todo repleto de vacío,
acostumbrado a
anhelarte con el esclavo color de la tristeza
dibujando tonos de
blanco y gris en mi voz.
Hay siniestros
tendenciosos del alma que culminan
con el suicidio
voluntario de un corazón que abandona
su latir si no te ve,
ése…
ése fue y es mi
familiar sentido peculiar de extrañarte,
de pasar el daño de
un dolor velado con dosis de duelo y tinta.
Autor: José Sánchez Llamas.
Antes de dejar la nada, yo, era un todo repleto de vacío,
ResponderEliminaracostumbrado a anhelarte con el esclavo color de la tristeza
dibujando tonos de blanco y gris en mi voz.