LOS AMANTES CIEGOS
Cuando todo se queda
a oscuras
y se ilumina el
firmamento,
somos dos ciegos más que
bailan al son de la noche
con el ritmo lento de
cada caricia intensa,
intuimos el siguiente
paso que marca nuestra piel
y su deseo que ser
recorrida
por otra piel suavizándose
con aquel leve contacto
que la aparta del
viento y la brisa
para proteger con ese
manto humano
el refugio de su
anhelo.
En ese delirante éxtasis
me atrevo a besarte,
sin más palabras ni
testigos que nuestro secreto,
con el arrojo que me
inspira tu ser
en el inmortal
encuentro de los amantes ciegos
que cierran sus ojos
al compás de cada caricia y beso
para sentirse el uno
al otro.
Autor: José Sánchez Llamas.
Cuando todo se queda a oscuras
ResponderEliminary se ilumina el firmamento,
somos dos ciegos más que bailan al son de la noche
con el ritmo lento de cada caricia intensa