HERIDAS DE TIEMPO
Todavía no logro recuperarme
de las heridas
cotidianas que me causa tu ausencia
cuando, sin querer,
te encuentro escondida
en algún recuerdo.
Y quise acabar con la
magnitud épica
de aquel sentimiento
tan doloroso
ocupando mi tiempo en
estar,
lo suficientemente, ocupado
para no poder pensar,
para volverme inmune
al tacto de cada lágrima
que mi corazón te
llora cuando con la voz de un latido
grita tu nombre a la
soledad de mi tiempo.
Así, paso los días
intentando creer
que las horas son una
casualidad de minutos
donde se reúnen los
segundos
para curar las
cicatrices que me dejó tu adiós.
Autor: José Sánchez Llamas.
Y quise acabar con la magnitud épica
ResponderEliminarde aquel sentimiento tan doloroso
ocupando mi tiempo en estar,
lo suficientemente, ocupado para no poder pensar