QUIZÁS NO DEBA AMARLA JAMÁS
Jamás una mirada
bastó para arrancar
de mi alma su último
suspiro enamorado,
jamás unos labios
hicieron tanto daño al besar,
jamás un sueño fue
tan efímero en su piel,
jamás un jamás fue
definitivo.
Quizás debí amarla
menos,
quizás me entregué
demasiado a la pasión de unos labios,
quizás vivía muriendo
cuando no la tenía,
quizás debí
comprender que su quizás era un jamás.
Quizás no deba amarla
jamás...
Autor: José Sánchez Llamas.
Quizás no deba amarla jamás...
ResponderEliminar