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miércoles, 25 de diciembre de 2013

RINDIENDO MIS ARMAS

RINDIENDO MIS ARMAS

Mis labios son las armas que hoy rindo ante tus besos,
mis manos guardan las caricias que alzan su bandera
al viento para rendirse ante tu piel,
y mis en mis ojos se refleja la imagen
de tu mirada penetrante, llena de luz, y rebosante de magia.
Las palabras no son más que brotes incoloros y sonoros
de letras en el lenguaje, y tú has conseguido que ante ti
logre enmudecer mi voz, y clamar a Dios piedad
con mi mudo grito de silencio.
Hoy rindo mis armas, mis labios, y mis caricias.
Hoy me niego a pensar en el futuro sin vivir
 en el presente de tu boca, me niego a soñar
ilusiones locas que se pierden en frustradas esperanzas
de un alma condenada a amarte mientras habite en este cuerpo
débil ante tu imagen y vacío sin ella.



Autor: José Sánchez Llamas.

1 comentario:

  1. Las palabras no son más que brotes incoloros y sonoros
    de letras en el lenguaje, y tú has conseguido que ante ti
    logre enmudecer mi voz, y clamar a Dios piedad
    con mi mudo grito de silencio.

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