AGUA

AGUA

Agua, quiero agua...

para que moje el pelo a mi niña

y se enrede en su trenza.

Para que bañe su cara y se confunda con sus lágrimas

borrando, de ese modo, la tristeza que se ve.

Agua, que corra por su piel,

y la refresque en esta calurosa tarde.

A veces, quiero ser agua y llegar a ti en forma de lluvia

para ser esa caricia que se desliza de arriba abajo por tu piel.

Quiero comenzar por acariciar tu pelo,

deslizarme, después, por tu rostro apartando esas lágrimas

y cubriéndote de esa refrescante caricia de mi tacto.

Así te quiero mi niña vestidita de añil,

tan suave y tan sutil

que quiero llegar a ti

en forma de lluvia de abril.

Agua, quiero ser agua...

para saciar tu sed cuando me necesites,

para que me bebas y estar dentro de ti.

Quiero que se calle el silencio

y broten todas las flores

para vestirte con sus colores y olores

y que en este cóctel de sabores

hacerte feliz con mis caricias para que nunca más llores.

Autor: José Sánchez Llamas.